lunes, octubre 20, 2008

MI INFANCIA ES

                                                                              

                                                             




                                   

                                                                                  Para Mandy porque de él copié la idea.


Mi infancia es una niña

subida en el tejado de la casa

para estar más cerca de las nubes.

Mi infancia es un hermano

recitando un poema

y la ausencia de otros dos.

Mi infancia es la mirada de mi padre

que me lleva por todos los caminos

de sus sueños imposibles.

Mi infancia es la certeza de mi madre

que me busca y me encuentra

en los sitios más ocultos.

Mi infancia son algunos personajes

de las manchas en el techo

con dibujos pintados en la pared.

Mi infancia son las piedras viejas,

los tangos de dos arroyos

y el saludo matutino del enebro.

Mi infancia es el grito de las flores

En el verde de los trigos.

Y trisar de los vencejos

En un inmenso cielo azul.

Mi infancia son tormentas de verano

con ese olor de los trillos en la era.

Las lunas y sus vaivenes

Y el sonido de dulzainas en las fiestas.

En mi infancia cuentan cuentos

los chopos de Riofresno

porque saben el nombre de todas las fuentes

y esperan pacientes los días de otoño.

Mi infancia es el silencio

de la nieve por las calles.

Y el frío del hielo

atrapado en algún charco.

Mi infancia son animales

Divirtiéndose en la noche.

Mi infancia es mi alegría.

Mi infancia está llena de cariño.

Mi infancia es mi libertad.

Mi infancia es un juego tan continuo

Que aún ando metida en él.

Luz del Olmo

*Mandy es el poeta cubano Osgmandy Lescallés

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8 Comments:

Blogger Fernando said...

¡Preciosa poesia!
Buena semana Luz

lunes, 20 octubre, 2008

 
Blogger PMT said...

Como te conozco hace muchos años, aunque no precisamente de infancia, sólo puedo felicitarte por este hermoso poema.
Luz: llama para tí siempre tendré un bun en rato.
PMT

lunes, 20 octubre, 2008

 
Blogger Pedro Ojeda Escudero said...

Es un bello texto: no podemos dejar de sentir la huella de la infancia.

lunes, 20 octubre, 2008

 
Blogger Abejita de la Vega said...

Te imagino correteando por los campos de Pardilla como Heidi en los Alpes.

lunes, 20 octubre, 2008

 
Blogger Ele Bergón said...

Gracias Fernando. Me alegro que te guste. Buena semana también para ti.

Un abrazo

lunes, 20 octubre, 2008

 
Blogger Ele Bergón said...

Gracias Pedro. Te llamaré y hablamos de lo que sea, hasta del tiempo.

Un abrazo

lunes, 20 octubre, 2008

 
Blogger Ele Bergón said...

Gracias por tus palabras Pedro, yo al menos no puedo dejar de sentir esa huella.

Un abrazo

lunes, 20 octubre, 2008

 
Blogger Ele Bergón said...

Me imaginas bien Abejita. Tuve una infancia tan feliz como Heidi. No correteaba por los Alpes, perosi lo hacia por los cerros de Pardilla.

Besos

lunes, 20 octubre, 2008

 

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