Por eso,
porque hay gaviotas
que enmudecen mi noche inútil
hago versos de viento
nacidos en un acorde azul.
La flauta y el oboe
entrelazados se arrullan,
resquebrajando
un hálito de sombra.
Innumerables,
diminutas
y transparentes
sirenas blancas,
arrancan la angustia penetrante
en cascadas verdiazules de papel.
Creo entonces:
Saltar al vacío
y encontrar,
lo que en la ciencia no hallé.
Me deja el azar
suspendida en un hilo
y en la sombra del tiempo,
mis gaviotas adaptan la letra al mar,
diluyendo el gastado hilo
en un viejo sueño.
(c) Foto y texto: Luz del Olmo
Del libro Pasaban las estaciones, al ritmo de los pájaros.
Etiquetas: mis poemas, Pasaban las estaciones..
3 Comments:
Muy bonita...
domingo, 27 marzo, 2005
Muchas gracias
miércoles, 07 febrero, 2007
Vale, muy bonita...
domingo, 25 marzo, 2007
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