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| Fue emotivo e interesante el pasear en un día de febrero lleno de sol, por este pueblo, donde el maestro Antoni Benaiges, dejó una huella imborrable de su sabiduría, antes de ser asesinado, por los amigos de la barbarie y enemigos de la cultura. |
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| Las cascadas del río Molinar en el pueblo de Tobera, son espectaculares. |
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| En Bribiesca el Templete y la Plaza Mayor, son también dignas de ver. |
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| En Pardilla los árboles desnudos, querían alcanzar el cielo azul. |
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| La sombra del enebro, también es alargada |
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| Y este años, la cosecha de almendros, será buena, a no ser que vengan las heladas. |
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Etiquetas: . Mis fotos. mis textos, Bañuelos de Bureba
1 Comments:
Te acompaño en tu paseo en el tiempo y en el espacio. Un maestro héroe y esos rincones que nos muestras.
lunes, 11 marzo, 2019
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