UN ÚLTIMO ADIÓS PARA MANUEL RODRIGUEZ RODRIGUEZ
Manuel, es el que lleva las muletas y falta Fernando Robles.
Me llega la noticia por las redes sociales. Hacía tiempo que no nos comunicábamos. Nada o muy poco sabíamos de él, aunque en los años, 80 y 90, del siglo que ya ha pasado, fuimos compañeros y amigos que compartíamos arte y en especial poesía, en la asociación ANTARES de Vicálvaro, un barrio al este de Madrid.
Fueron unos años intensos en actividades culturales con recitales, exposiciones y otros eventos.
Un componente del Grupo, Felipe Ángel Rodriguez, lo dejó muy bien documentado en esta entrada de su blog:
http://hormigaciones.blogspot.com/2009/05/antares-programas-de-mano.html
Después, con la llegada del siglo XXI, poco a poco, como sucede a casi todo lo que empieza y se consolida, se fue apagando la llama que nos unía y dejamos que la Asociación o Grupo poético, como también nos llamábamos, se fuera extinguiendo y en mí cayó la tarea de dar por terminada toda esta experiencia. Lo que no sabían los que me dijeron que lo hiciera, es que yo, precisamente yo, soy incapaz o me cuesta mucho, poner fin a relaciones que tanto significan en mi vida. Por eso, nunca llegué a dar de baja a esta asociación.
Hace apenas unos días y por casualidades del destino o no sabemos muy bien por qué, me entero por las redes sociales que Manuel Rodríguez, Rodríguez ha fallecido. Fue como si me dieran un golpe de realidad, como el despertar brusco de un sueño, al comprobar que algo se había a empezado a romper, porque un componente del grupo, aunque hiciese tiempo que no sabíamos de él, ni nos habíamos preocupado, ya nunca volvería a estar con nosotros, para darnos órdenes, con una de sus dos muletas en las exposiciones, de dónde colocar el cuadro e indicando qué es lo que estaba bien o mal.
Manuel, siempre fue el presidente de siete poetas locos que vivíamos el arte en todas sus dimensiones, pero a la vez también la amistad, con nuestros consensos y disensos, que hubo muchos y sin embargo, esta etapa de nuestras vidas, yo la recuerdo llena de sueños, vitalidad, ilusiones, alegrías.....porque lo negativo, ya se borró en mi memoria selectiva.
Manuel fue un gran poeta y como muestra, dejo estos poemas que he encontrando revolviendo papeles de otros tiempos.
Nuestro primer recital de poesía fue en el Colegio Vicálvaro el 19 de abril de 1986 a las 19 horas.
Hay una copa que estalla
y los cristales son como balas de rocío.
Una pieza morada.
Una gota que cae,
columna de agua
estalactita breve.
Flota la hoja.
Una cruz amarilla.
fotografiada.
Sólo son sombras.
Alambrada.
Un arco de violín,
grita y llora
Pluma azul.
al rozar,
el violín de agua.
Huella de serpiente de Nata.
Un Hada
Amalgama.
Gotas de Ambar
diluido en fragancias.
La Palabra
MANUEL RODRIGUEZ RODRIGUEZ
22/8/85
de esta lucha fratricida
que divide a los hombres
en malos y buenos, sin pensar
que lucharon ayer al unísono
por aquellas ansias de libertad.
Y arrastré conmigo a mi sombrero
mi abrigo, mi patio y mi Duero
y los pasos del caminante al andar.
..Y dejé la frontera guardiana de amores
de poemas, de sol y flores
para adentrarme en la niebla
del dolor, el destierro y la enfermedad.
Y cuando a mí llegue la noche
y con ella arrastrarme quiera
dejaré como herencia una vida
unos sueños, algún libro y un pensar.
26 de marzo de 1995
Etiquetas: Manuel Rodriguez. Antares
6 Comments:
Machado siempre tan actual, aunque actúe por lengua interpuesta.
¡Larga vida aún a ANTARES!, que nunca se sabe.
domingo, 20 octubre, 2019
Descanse en paz y larga vida a su creación, nunca morirá del todo si hay un lector.
domingo, 20 octubre, 2019
Un abrazo solidario, querida amiga.
domingo, 20 octubre, 2019
Carmen, sí, Machado es el inmortal y para siempre. En cuanto a ANTARES, supongo que quedará perdida en los avatares del tiempo.
Son Austringiliana, efectivamente, algo de Manuel vivirá en sus escritos.
Pedro, muchas gracias por tu abrazo. La pena, aunque en distinto grado, nos puede unir.
Besos a los tres
lunes, 21 octubre, 2019
Las personas vamos acumulando un cementerio en nuestros corazones.
Abrazos.
jueves, 24 octubre, 2019
Ignacio, que razón tienes, poco a poco se nos van marchando muchas de las personas a las que queremos porque significaron algo importante en nuestras vidas.
Un abrazo.
sábado, 26 octubre, 2019
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