Le tengo mucho cariño porque
durante algún tiempo, he vivido con él, por eso cuando fui disparada conocía
con toda precisión mi trayectoria y a mi destinatario, pero al verle tan aterrorizado, resolví tomar decisiones
por mi cuenta y desviarme a penas un milímetro, rebotar en la pared que lo
sujetaba y hacer el camino de vuelta para instalarme en el corazón del que
durante algún tiempo, había sido mi amo.
(c) texto: Luz del Olmo
Etiquetas: Mis textos. Relato breve.
6 Comments:
Una bala que regresa al punto de partida. Ya lo decían los primeros libros que paraban las balas: quien a hierro mata...
viernes, 16 noviembre, 2012
Si he entendido bien es la bala la que habla... ¡Genial! Besotes, M.
viernes, 16 noviembre, 2012
Muy bueno, Luz, da gusto fabular, y darle vida propia a las cosas. Más vale tarde...
Besos.
viernes, 16 noviembre, 2012
Rebeldía de una bala, genial, Luz.
Besos
viernes, 16 noviembre, 2012
Si las balas pudieran elegir, seguramente desviarían su camino más a menudo.
Besos
domingo, 18 noviembre, 2012
¡Vaya bala traviesa la tuya!
viernes, 23 noviembre, 2012
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