lunes, octubre 11, 2021

LA HORA DEL SOSIEGO. Yolanda Izard

Cuando termino de leer La hora del sosiego, pienso que esta novela de Yolanda Izard, es un libro escrito con un buen ritmo poético, aunque decaiga en algunas de sus 159 páginas, mientras nos va relatando en los pensamientos de su protagonista Berta, cómo se aparta del mundo al comprar una isla desierta para poder vivir en absoluta libertad, su gran soledad, tan solo acompañada por su perrita María y también todos sus recuerdos, donde tienen gran relevancia los muertos, que de una forma u otra, llegaron a su camino de vida, para así, rencontrarse con ellos y especialmente consigo misma, intentando lograr  lo que tanto persigue y anhela.

 

Reflexiono al llegar a la última página de este libro, que al bucear en nuestro interior, sea en soledad o en compañía, no es nada fácil de llegar a esa  reconciliación con uno mismo o misma, hasta  conseguir entrar en La hora del sosiego que con frecuencia tanto necesitamos, porque no es tan importante el dónde estemos, sino más bien cómo nos sintamos.

 

Felicidades a Yolanda Izard por lo escrito y por traer este tema tan vital para nuestra supervivencia como seres humanos.

 

(c) Luz del Olmo

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8 Comments:

Blogger Myriam said...

no he leido el libro.
Acá en Montevidoe no s econsigue.

Pero de acuerdo a lo que dices y conforme te iba leyendo,
iba coincidiendo contigo en que no importa en donde estemos,
no es necesario irse a ina isla desierta, para hacer un trabajo interior de esa embergadura. ¿Qué si lo he hecho y he logrado ese sosiego interior? Pues, Sí.
Totalmente. Y de ahí que pueda ser agradecida con la vida y con los dones que a diario recibo/bimos y algo d elo que no muchos son conscientes, siempre quejandose por lo que les falta.

Beso grande, Luz

jueves, 14 octubre, 2021

 
Blogger La seña Carmen said...

Viendo la poesía interna de las cosas.

viernes, 15 octubre, 2021

 
Blogger Sor Austringiliana said...

La Isla está en nosotros mismos. Y la Isla se traslada. Un buen enfoque el tuyo. Besos, Luz.

viernes, 15 octubre, 2021

 
Blogger Pedro Ojeda Escudero said...

Lamento que se me pasara esta entrada tuya, que incorporo a la entrada de esta semana, actualizándola. Eres una parte muy importante de este club, Luz.

En efecto, esta obra tiene una intensidad lírica -el lirismo también puede ser del sufrimiento- y nos interroga continuamente. ¿Hasta dónde somos capaces de bucear en nosotros mismos, abandonar la comodidad de la mentira en la que hemos convertido nuestras biografías y llegar a lo que somos realmente? Una pregunta que no nos deja indiferentes.
Gracias, como siempre.
Besos.

viernes, 15 octubre, 2021

 
Blogger Ele Bergón said...

Myriam, es difícil, pero no imposible, el llegar a ese sosiego interno. Me alegro mucho el que lo hayas conseguido, pero no te fíes que en cualquier momento.....buf! se puede desmoronar. Te lo digo por propia experiencia.

Besos

lunes, 18 octubre, 2021

 
Blogger Ele Bergón said...

Pedro, te lo recordé porque tú mismo nos dices que lo hagamos, si se te olvida mencionarlo en en las entradas de la Lectura de La Acequia. Por supuesto, no pasa absolutamente nada. Todos tenemos despistes y gracias por tus palabras que me hacen un poco sonrojarme. Soy de las veteranas como Myriam, Mª Ángeles....

Muy buena tu pregunta y estoy muy de acuerdo contigo. Ahí está el quiz de la cuestión y este libro de Yolanda Izard, nos lleva hasta ello.

Besos

lunes, 18 octubre, 2021

 
Blogger Ele Bergón said...

Carmen, supongo que cuando tengas tiempo de leerlo ya lo comentaremos. Sí, la poesía está muy presente en esa "hora del sosiego" en el libro y sabes que también en mí.

Besos

lunes, 18 octubre, 2021

 
Blogger Ele Bergón said...

Sor Austringiliana, no por ser la última en contestarle, es su reverencia la menos importante, ya sabe que eso no es así.

Dice bien " la isla está en nosotros mismos". Como siempre cuatro palabras, pero muy certeras.

Toque de tocas

La sor Pardilla.

lunes, 18 octubre, 2021

 

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